
El Centro nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CENARD) dejará su actual predio ubicado sobre la avenida Libertador en el barrio de Núñez, para pasar a la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Villa Soldati
La medida está consensuada entre el gobierno nacional (dueño del CENARD) y el porteño, que posee las tierras del Parque Olímpico, hasta ayer sede principal de Buenos Aires 2018 y a partir de ahora el lugar en el que estará ubicado el Centro Deportivo. Mientras el CENARD pasa a las tierras que tiene el gobierno porteño, el gobierno nacional cederá a la Ciudad los terrenos de la zona de Núñez.
Si se esperaba un anuncio más formal sobre el traslado del Cenard, no ocurrió. Lo mismo pasó la semana pasada cuando el Presidente le informó a un periodista durante su visita a la Villa Olímpica quién sería el próximo secretario de Deportes de la Nación, el empresario Diógenes de Urquiza. Está claro que decisión política del traslado está tomada, aunque sin haber intentado consensuar la idea con los deportistas de alto rendimiento.
Al pasar, rápido, como entre dientes, Macri blanqueó la intención y el acuerdo entre la Nación y la CABA. Justamente, del acto de ayer participó el jefe de Gobierno Porteño, Horacio Rodríguez Larreta; además, el presidente del comité organizador de los Juegos de la Juventud y del COA, Gerardo Werthein.
Rodríguez Larreta tiene mucho que ver en la construcción de las instalaciones de la Villa Olímpica, ya que fue el Gobierno de la Ciudad el que aportó el dinero para las diferentes obras, que cederá a la Nación para que los deportistas de alto rendimiento puedan entrenarse en el flamante predio del Sur. A cambio, el jefe de Gobierno porteño recibirá el control del predio donde está emplazado el Cenard, terrenos que, se sabe, tienen un elevado valor por su ubicación privilegiada en pleno corazón del barrio de Núñez.
En su mensaje a los deportistas, el presidente reconoció el frente de tormenta que atraviesa su gobierno. “Me imagino que no han dejado de percibir unos meses muy difíciles, que nos tocó vivir, meses complicados que nos han hecho reflexionar si de verdad vamos a producir un cambio”, admitió. Luego habló del deporte olímpico, que “también sufrió la inestabilidad de la Argentina”.
Por último, Macri festejó la buena imagen de Buenos Aires que se llevaron los dirigentes del COI, con el alemán Thomas Bach a la cabeza, y se mostró entusiasmado con la posibilidad de que la ciudad de Ushuaia pueda organizar los Juegos Olímpicos de Invierno del 2024. “Ahora está el sueño de Ushuaia, para más adelante otros sueños”, comentó.