Salud: ¿Hablamos de dientes?

  Exhibir siempre una buena sonrisa depende en parte de nuestro humor, pero definitivamente de la salud de nuestros dientes. La caries dental ocupa, sin lugar a dudas, el primer lugar entre las afecciones más comunes que atacan a pacientes de toda edad. Al destruirse los tejidos dentarios sin asistencia preventiva correcta, las piezas dentales se pierden.

El primer síntoma es la pérdida del esmalte (tejido duro que cubre la corona de los dientes), prosigue con la dentina (tejido menos resistente que compone el diente) y culmina con la pulpa (tejido blando que contiene el paquete de nervios, venas y arterias que dan vida a la pieza).

La causa de la afección es la acumulación de ácidos, restos de alimentos y azúcares, que generan la denominada placa bacteriana. Los hidratos de carbono contenidos en los alimentos rodean y cubren la dentadura hasta destruir el esmalte y proseguir con su lenta pero segura evolución.

No hay un solo tipo específico de caries, sino una variedad que se conforma por la relación entre los microorganismos y la estructura dental del afectado, los que, por mutaciones diversas, inducen a la formación de placas bacterianas distintas.

Los especialistas recomiendan una visita periódica preventiva al odóntologo y seguir reglas de oro para mantener una dentadura aceptable: dietas balanceadas e ingesta constante de lácteos (leche entera o descremada, crema, yoghurt), fruta, cereales, legumbres y carnes rojas y blancas (vaca, aves, pescado). En cambio, los productos prohibidos están encabezados por el exceso de hidratos de carbono y azúcares, que son cariogénicos, por lo que se recomienda que su consumo sea restringido a las necesidades de la dieta. En esta categoría ingresan las pastillas, galletitas dulces, chicles, bebidas gaseosas, café, té o mate con azúcar. Si se consume alguno de ellos, inmediatamente recurrir a una adecuada higiene dentaria que prolongará la vida útil de los dientes. Estas medidas preventivas son el punto de partida para exhibir una sonrisa espléndida que alegrará su vida y de los que le rodean.

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