Belgrano: Las secuelas de la tormenta dominguera

 

Este lunes amaneció con la visión de los estragos que las lluvias causaron en la ciudad de Buenos Aires y alrededores. Belgrano no estuvo exento de esta situación, ya que algunos sectores quedaron sin luz a causa de la tormenta.

Además, la caída de un árbol que aplastó a tres vehículos estacionados en Av. Libertador, casi Migueletes, no soló ocasionó daños en los autos, sino que también obstruyó gran parte de la calzada.
El servicio meteorológico trajo un poco de tranquilidad a los vecinos, anunciando que la tormenta se iría disipando hacia la tarde o noche.
Ya durante la mañana, las calles anegadas estaban drenando de manera normal haciendo que la zona volviera paulatinamente a su ritmo habitual, tanto en relación al tránsito como a las actividades propias del lugar.
También fueron muy afectados los barrios de Avellaneda y Lanús que aún permanecen sin luz, en tanto Quilmes y los barrios porteños de Devoto, Recoleta, Caballito y Microcentro también registran apagones puntuales por los mismos motivos.
Estas dificultades son propias de las lluvias que, por momentos tienen una intensidad inusual, llegando a saturar los drenajes y provocar problemas con la energía eléctrica. En la misma medida y proporcionalmente a la duración de los momentos más intensos, la situación se normaliza a un ritmo bastante rápido.
Hay que reconocer que en Belgrano las cosas han mejorado de aquellos años en que la venta de ropa o zapatos deteriorados por los comercios anegados se habían convertido en un clásico de la zona. Los carteles de “Gran barata por inundación” aparecían a lo largo de la Avenida Cabildo y muchos conerciantes se habían ingeniado para construir una especie de compuertas para evitar la entrada del agua a sus comercios o viviendas.

Estas dificultades se fueron solucionando a raíz de las importantes obras encaradas por el gobierno de la ciudad y que habín sido pospuestas por años.
Por lo que se ve, no todo tiempo pasado fue mejor