
Los secuestros virtuales, en los que se engaña a personas llamándolas y diciéndoles que tienen a un familiar suyo secuestrado, lejos de disminuir se mantienen en el podio de los delitos más cometidos con 196 denuncias en lo que va de 2016, es decir se denuncia más de uno al día. Pero el dato que más llama la atención es que la mayoría de los secuestros ahora se concentra en tres barrios porteños: Belgrano, Palermo y Recoleta.
Las bandas buscan directamente víctimas de buen poder adquisitivo y que puedan llegar a tener dinero en su casa. Así logran botines importantes y rápidos. Esta modalidad arrancó en Colombia y México y luego se exportó a la Argentina. Actualmente Estados Unidos es uno de los países con más secuestros virtuales”, contaron a diario Clarín especialistas en el tema
Los datos de la Procuración General de la Nación sólo abarcan los casos que fueron denunciados, que son la minoría, y en los que no se pudo identificar a los autores. Esto significa que el fenómeno es mucho más grande que lo que indican los números. De hecho, la inmensa mayoría de las víctimas jamás avisa a las autoridades.
Igual, en lo que va del año la tendencia está en alza. De los 196 casos de 2016, 24 fueron en enero; 63, en febrero; 52, en marzo; y 57, en abril. El barrio donde más secuestros virtuales se registraron fue Recoleta: 28 casos. Lo siguen Palermo (22) y Belgrano (17).
El pico máximo de secuestros virtuales ocurrió en febrero de 2014, cuando se denunciaron 234 episodios. Fue entonces que el Ministerio Público Fiscal creó un equipo especial de siete fiscales para combatirlos.
El director de Análisis Criminal de la Procuración, Diego García Yomha, señaló que las víctimas son elegidas al azar pero, en general, las que terminan pagando son mayores de 60 años. Las bandas operan todos los días, a partir de las 2 de la madrugada y hasta las 6, salvo los fines de semana, que lo hacen hasta las 8.